El sorteo del Grupo B del AfroBasket 2025, que se celebrará del 12 al 24 de agosto en Angola, ha despertado tanto expectativa como cautela entre sus contendientes. Con Túnez, Nigeria, Camerún y Madagascar en el mismo grupo, el pasado reciente sugiere una ventaja para las Águilas de Cartago, pero los jugadores no se atreven a hacer predicciones definitivas. Todos han compartido la cancha en la última década, intercambiando victorias y construyendo una rivalidad que promete nuevas páginas intensas en esta edición del torneo continental.
Túnez parte como cabeza de serie tras dominar su grupo clasificatorio con marca de 5-1 y contar con figuras como Omar Abada y Makram Ben Romdhane. Nigeria llega tras una inesperada recuperación en la ventana de febrero de 2025, mientras que Camerún cuenta con talentos emergentes como Jeremiah Hill y Williams Narace. En tanto, Madagascar, aunque menos favorecido en los pronósticos, ha demostrado capacidad de sorprender gracias a una generación joven liderada por Mathias M’Madi y Sitraka Raharimanantoanina.
Túnez lidera, pero nadie se confía en el Grupo B
A pesar del liderazgo de Túnez en el ranking FIBA de África (4.º), el respeto entre los equipos del Grupo B es evidente. El historial reciente muestra que las diferencias en la cancha se han estrechado. Túnez sigue confiando en su base de campeones, con Abada como motor ofensivo y Ben Romdhane como referente en los tableros. Sin embargo, voces como la del veterano Radhouane Slimane advierten sobre un posible desgaste del equipo en medio de una transición generacional. “No podemos subestimar a nadie. Ni siquiera Madagascar”, expresó con sinceridad.
Nigeria y Camerún llegan con impulso. Los D’Tigers renacieron en Libia, con Caleb Agada como figura estelar, mientras Camerún se apoya en la creatividad de Hill y la potencia de Narace. Madagascar, por su parte, representa el factor impredecible: ha mostrado crecimiento y confianza, y sus referentes no se intimidan ante rivales de mayor jerarquía. Como dijo Raharimanantoanina: “Somos los menos favoritos, pero ya hemos demostrado que podemos dar la sorpresa”. En un grupo donde todos tienen argumentos, el desenlace dependerá únicamente de lo que suceda en la cancha.
