Salt Lake City se encuentra en el centro de una controversia que amenaza con despojarla de su derecho a organizar los Juegos Olímpicos de Invierno de 2034. A pesar de haber asegurado la sede en julio pasado, la ciudad enfrenta tensiones crecientes debido a un acuerdo firmado entre el Comité Olímpico Internacional (COI) y Estados Unidos. Este pacto condiciona la realización de los Juegos al respeto de la «autoridad suprema» de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), un tema que ha generado fricciones entre el gobierno estadounidense y las autoridades olímpicas.
El caso tiene sus raíces en la decisión de la AMA de permitir la participación de 23 nadadores chinos en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, a pesar de pruebas positivas de dopaje. Esto desencadenó una investigación por parte de las autoridades estadounidenses, alimentando las críticas hacia la AMA y llevando a un impasse que podría costarle a Utah su segunda oportunidad olímpica. Según el gobernador de Utah, Spencer Cox, aceptar el acuerdo era la única forma de garantizar la sede, pero desde entonces las críticas no han cesado, tanto dentro como fuera del país.
UN CONFLICTO MÁS ALLÁ DEL DEPORTE
La polémica no se limita a las disputas locales. El New York Times reportó recientemente que ni el presidente de la Comisión Olímpica y Paralímpica de Estados Unidos (USOPC), Gene Sykes, ni los representantes de Salt Lake City han tomado medidas concretas para cumplir las promesas hechas al COI. Además, la administración estadounidense no ha pagado sus cuotas anuales a la AMA, exigiendo antes una auditoría independiente. Mientras tanto, la USADA (Agencia Antidopaje de Estados Unidos) ha intensificado sus críticas hacia la AMA, acusándola de encubrir resultados de dopaje que salieron a la luz antes de los Juegos de París 2024.
El panorama se complica con la Ley Rodchenkov, una normativa estadounidense que amplía la jurisdicción federal en casos internacionales de dopaje. Esta ley, rechazada tanto por el COI como por la AMA, ha tensado aún más las relaciones entre las entidades, especialmente de cara a los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028. Con un presidente entrante que promovió esta legislación y candidatos al COI que priorizan la lucha antidopaje en sus agendas, el futuro de los Juegos de Invierno de 2034 en Salt Lake City sigue siendo incierto.