Sam Reardon no se clasificó para los Juegos Olímpicos de París, es más, el atleta vio la ceremonia de apertura por la televisión. Ahora bien, la ceremonia de clausura la celebró con sus compañeros del equipo británico como doble medallista olímpico.

Reardon se lesionó en el tendón de la corva y lo dejó fuera de la final de 400 metros en las pruebas británicas olímpicas. Semanas después, batió su mejor marca en la Diamond League de Londres, pero ya no podía ser seleccionado para los Juegos.

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Charlie Carvell, miembro del 4x400m se vio obligado a retirarse debido a una lesión justo cuando comenzaban los Juegos. Al día siguiente de la ceremonia de apertura por el Sena, Reardon recibió la llamada de la convocatoria como reemplazo de su compañero Carvell.

Tras el primer fin de semana de pruebas de atletismo, Reardon, junto a Laviai Nielsen, Alex Haudock-Wilson y Amber Anning, habían ganado el bronce en 4×400 mixtos, estableciendo un nuevo récord nacional. Además también sumó un bronce en el 4×400 masculinos.

Además, Reardon, subió al podio llevando una foto de su madre Marilyn en su bolsillo. “Ella siempre decía que su sueño era verme en un escenario olímpico. Para mí era un sueño enorme contar con su apoyo” comentó Reardon sobre su madre, que murió en 2019.

“Ha sido un viaje loco y sin parar, todo me ha llegado a 320km/h, pero he intentado aprovecharlo al máximo, llegar a los Juegos Olímpicos, hacer una carrera, ganar una medalla y luego otra” ha apuntado Reardon que también comenta que “seré doble medallista olímpico para siempre, podría terminar mi carrera aquí y sería feliz”