Los Jacksonville Jaguars confirmaron que su mariscal de campo, Trevor Lawrence, no jugará más esta temporada tras sufrir una grave conmoción cerebral. El incidente ocurrió en el enfrentamiento contra los Houston Texans, donde un violento golpe del linebacker Azeez Al-Shaair marcó el desenlace de un año complicado para el equipo. La noticia, que impacta tanto a la franquicia como a sus aficionados, deja a los Jaguars con marca de 2-10 y fuera de la contienda por los playoffs.
La situación obliga a los Jaguars a reorganizarse rápidamente. Con Mac Jones programado para tomar la titularidad este fin de semana contra los Tennessee Titans, y el reciente fichaje de John Wolford para reforzar la posición de quarterback, Jacksonville busca cerrar la temporada de la manera más competitiva posible. Además, adquirieron al receptor Josh Reynolds de los Denver Broncos, con la esperanza de sumar mayor dinamismo ofensivo.
EL GOLPE QUE SACUDIÓ A LA NFL
El incidente ocurrió durante el tercer cuarto del partido en el EverBank Stadium. Lawrence fue impactado violentamente por Al-Shaair en un golpe tardío, lo que desató un enfrentamiento entre ambos equipos. El mariscal de campo quedó inmovilizado en el césped con síntomas claros de conmoción cerebral, mientras el cuerpo médico acudía rápidamente. La acción fue calificada como innecesaria y resultó en una suspensión de tres partidos para el linebacker de Houston, quien ofreció disculpas públicas tras el incidente.
“Lo siento profundamente. Nunca fue mi intención lastimar a un compañero de profesión, y mucho menos de esta manera”, expresó Al-Shaair en sus redes sociales, asegurando que actuó sin mala intención. Sin embargo, el golpe ha generado un intenso debate sobre la seguridad en el deporte y la necesidad de prevenir este tipo de acciones en el futuro.
FIN DE LA TEMPORADA PARA LAWRENCE
La conmoción cerebral es solo el último de varios problemas físicos que Lawrence ha enfrentado este año. Previamente, el quarterback había lidiado con lesiones en el hombro, rodilla y tobillo, además de otra conmoción hace unas semanas. En los 10 juegos que disputó esta temporada, acumuló 2,045 yardas aéreas, 11 pases de touchdown y siete intercepciones, además de contribuir con tres anotaciones terrestres.
Con los Jaguars eliminados de los playoffs, la prioridad ahora es la salud a largo plazo de Lawrence, quien permanecerá en la lista de reservas lesionados hasta la próxima temporada. Mientras tanto, el equipo buscará cerrar con dignidad un año lleno de desafíos.