Los aficionados de los Toronto Raptors protagonizaron una nueva muestra de descontento político en el mundo del deporte al abuchear el himno de Estados Unidos antes del partido contra Los Angeles Clippers. El suceso ocurrió el domingo en el Scotiabank Arena de Toronto, sumándose a una tendencia que ya se había visto en encuentros de la NHL en Ottawa y Calgary el día anterior.
El descontento surge tras la decisión del expresidente Donald Trump de imponer aranceles a productos de Canadá, México y China, lo que ha generado tensiones comerciales (el siguiente puede ser la Unión Europea). En respuesta, tanto el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, como el presidente de México han anunciado medidas de represalia.
UNA PROTESTA QUE SE EXTIENDE EN EL DEPORTE
Antes del partido, el público ovacionó a la joven de 15 años encargada de interpretar los himnos. Sin embargo, cuando comenzó a cantar The Star-Spangled Banner, los abucheos se hicieron notar en todo el recinto. Al finalizar, hubo una combinación de silbidos y aplausos, que dieron paso a una entusiasta ovación durante la interpretación de O Canada.
No es la primera vez que los aficionados en Canadá muestran su descontento con políticas estadounidenses a través de este tipo de gestos. A principios de este siglo, durante la guerra de Irak, los abucheos al himno estadounidense también fueron frecuentes en eventos deportivos.
REACCIÓN DE LOS JUGADORES
Los propios jugadores de los Raptors notaron la reacción del público. Garrett Temple, alero estadounidense del equipo, reconoció que fue un momento impactante: «Sí, por supuesto que lo noté. La reacción fue ‘wow’. Luego piensas en por qué lo hacen. Hay muchas cosas más grandes que el baloncesto en este momento. Jugamos en Canadá y ellos tienen su postura sobre la situación comercial y los aranceles».
Por su parte, el canadiense Kelly Olynyk mostró empatía hacia la joven que interpretó los himnos y reconoció el impacto que la medida de Trump tiene en la población: «Obviamente, [los aranceles] afectan a mucha gente en este país y en este estadio. Me dio pena la chica que cantaba, pero al final la ovacionaron, y eso me alegró».