Reino Unido pierde 7.000 profesores de educación física desde los Juegos Olímpicos de Londres 2012
SportsIn
febrero 26, 2025

Según un informe publicado por ‘The Guardian’, el Reino Unido ha perdido 7.000 profesores de educación física desde que albergó los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Londres 2012. Además, el 30% de los niños realiza menos de 30 minutos de actividad física al día, incluyendo caminar. Estas cifras alarmantes fueron presentadas durante la primera sesión parlamentaria del Comité de Cultura, Medios y Deporte británico, que investiga los desafíos en la provisión de deporte para niños y jóvenes, así como las posibles soluciones para revertir esta preocupante tendencia.

La presidenta del comité, Dame Caroline Dinenage, destacó ante los parlamentarios británicos que en el último año académico se impartieron 41.000 horas menos de educación física en comparación con el período 2011-2012. Además, los niños tienen, en promedio, 20 minutos menos de tiempo de recreo en las escuelas que hace 30 años, lo que agrava aún más la falta de actividad física en las generaciones más jóvenes.

EDUCACIÓN FÍSICA COMO ASIGNATURA CLAVE

Ali Oliver, directora ejecutiva de la organización benéfica Youth Sport Trust, advirtió al parlamento, según recoge ‘The Guardian’, que la disminución de los niveles de actividad física tendrá consecuencias graves en el desarrollo cognitivo y la salud a largo plazo de los niños. Oliver instó a que la educación física se convierta en una asignatura central en las escuelas, al mismo nivel que matemáticas o inglés.

“Si la educación física fuera una asignatura clave, tendría un estatus más alto y un nivel de responsabilidad que impulsaría los estándares y el compromiso”, afirmó Oliver. También señaló que la formación de los profesores en esta área es insuficiente, ya que los maestros de primaria reciben, en promedio, solo entre cuatro y seis horas de capacitación en educación física, lo que calificó como “totalmente inadecuado”.

LA IMPORTANCIA DEL EJERCICIO FÍSICO EN NIÑOS

Montell Douglas, exvelocista olímpica y entrenadora, subrayó la necesidad de otorgar a la literacidad física el mismo nivel de importancia que la alfabetización en matemáticas o inglés. “Es fundamental que los jóvenes desarrollen habilidades físicas básicas, como atrapar una pelota a cierta edad, de la misma manera que se espera que aprendan a leer a una edad específica”, explicó Douglas.

Douglas también destacó que el deporte debe promoverse como una pasión y una habilidad para toda la vida, capaz de transformar positivamente las vidas de los niños y jóvenes. “Esa es la fórmula ganadora”, añadió, haciendo un llamado a las escuelas para que fomenten el movimiento y el deporte como pilares esenciales del desarrollo infantil.

EL VALOR DEL DEPORTE ESCOLAR

La nadadora olímpica Anna Hopkin, ganadora de una medalla de oro en los Juegos de Tokio 2020, también participó en la sesión y defendió la importancia de la competencia en el deporte escolar. Hopkin recordó cómo, hacia el final de su etapa en la escuela primaria, los días deportivos se transformaron en sistemas de puntos para evitar que los niños experimentaran el fracaso. Aunque entendió la intención detrás de esta medida, enfatizó que aprender a lidiar con el éxito y el fracaso desde una edad temprana es crucial.

“Es importante permitir que los niños experimenten la competencia en un entorno de apoyo”, afirmó Hopkin. Según ella, estas experiencias no solo fortalecen la resiliencia, sino que también preparan a los niños para enfrentar los desafíos de la vida.

LECCIONES PARA LAS CIUDADES OLÍMPICAS

El caso del Reino Unido pone de manifiesto la importancia de garantizar que el legado de los Juegos Olímpicos no se limite a la infraestructura, sino que también se traduzca en una apuesta sólida por el deporte y la actividad física en las generaciones futuras. Las ciudades que albergan eventos olímpicos deben priorizar políticas que promuevan la educación física y el acceso al deporte, asegurando que los beneficios de estos eventos perduren en el tiempo.

El legado deportivo no solo debe medirse en términos de medallas o instalaciones, sino también en el impacto positivo en la salud, el desarrollo y la calidad de vida de los niños y jóvenes. Este compromiso es esencial para evitar que situaciones como la del Reino Unido se repitan en otros países que apuestan por el deporte como motor de cambio social.

Últimas Noticias