Lima, Perú, tendrá el raro privilegio en 2027 de ser anfitriona de los Juegos Panamericanos, dos veces en ocho años. Sí, privilegio, pero también la responsabilidad organizativa con sólo 3 años de separación de la próxima cita continental. La ventaja es, salvo la construcción de una nueva Villa Panamericana, que la infraestructura deportiva existe y con la modernidad que los deportistas de América ya comprobaron en 2029. Siendo la Villa Deportiva Nacional (Videna), la que concentra el mayor número de infraestructura de primer nivel y el secreto de la explosión del deporte peruano.
Este vasto complejo se encuentra ubicada en el distrito de San Luis y es administrada, en la actualidad, por el Proyecto Especial Legado. La Videna es más que un conjunto de instalaciones: es el corazón del deporte peruano y donde se encuentran las sedes de varias federaciones deportivas como las de fútbol, atletismo, ciclismo, gimnasia, softball, béisbol y lucha. Además, el recinto es también el lugar de entrenamiento de las selecciones nacionales de fútbol, atletismo y béisbol. Por si fuera poco, el Comité Olímpico Peruano tiene allí su sede principal.
La historia de Videna se remonta a 1969, cuando el área fue declarada como el parque zonal mediante un Decreto Supremo. En 1981, la zona fue entregada al Instituto Nacional de Recreación, Educación Física y Deportes (INRED). Para en 1993 levantarse el complejo actual (sobre las 21 hectáreas). Los primeros trabajos de remodelación fueron entre 2009 y 2010, como parte de la postulación de Lima como sede de los Juegos Panamericanos de 2015. Aunque esa postulación no prosperó, las obras continuaron y en 2014 se inauguró el Centro de Alto Rendimiento de Lima.
«Es difícil expresar lo que siento»
Para Lima 2019 se construyó un estadio de atletismo con capacidad para 12.000 espectadores, un velódromo techado con capacidad para 2.500 personas y un centro acuático que puede albergar a 4.000 aficionados. En el momento de inaugurar los pasados juegos limeños, Neven Ilic, timonel de Panam Sport, fue categórico: “Es difícil expresar lo que siento. Esto costó mucho. Hace un año y medio se veía difícil, pero logramos la tarea”.
Para entenderlo mejor, la Videna está compuesta por varias instalaciones deportivas. El Complejo Deportivo de Fútbol fue inaugurado en 1996, con 50.000 metros cuadrados. Cuenta con tres campos reglamentarios, un coliseo de futsal, habitaciones para los deportistas, un gimnasio, un auditorio, vestuarios, sauna, jacuzzi, un salón de prensa y las oficinas de la Federación Peruana de Fútbol. En abril se iniciaron las obras para la renovación del complejo, incluyendo nuevos edificios que albergarán un hotel, instalaciones técnicas y oficinas corporativas.
El estadio atlético es uno de los más antiguos del complejo, por lo que fue renovado con una pista de atletismo azul hecha en Alemania. Remodelación que permitió albergar los Juegos de 2019. Cuenta con la homologación y Certificación Clase 1 de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF), esta infraestructura permite desarrollar eventos de carácter nacional e internacional de alto nivel. El Centro de Alto Rendimiento de Voleibol dispone de cuatro canchas reglamentarias techadas, iluminación eficiente y un suelo de material sintético. Incluye vestuarios y salas de conferencias técnicas.
EL CAR QUE PRONTO DARÁ SUS FRUTOS
El Centro de Alto Rendimiento (CAR) abarca dos polideportivos y una residencia con capacidad para 252 deportistas. El Polideportivo 1, con un área de 9.500 metros cuadrados, donde se practica baloncesto, balonmano y gimnasia. El Polideportivo 2, con 11.500 metros cuadrados, acoge al karate, bádminton, tiro, esgrima, tenis de mesa, levantamiento de pesas, lucha y judo. El Bowling Center es una instalación con 24 pistas de última generación, entregadas a la Federación Peruana de este deporte antes de los Juegos Panamericanos Lima 2019. El moderno Velódromo internacional se destaca como uno de los más avanzados del continente. Por último, una verdadera joya: el Centro Acuático. Escenario de primer nivel para la natación, natación artística, clavados y para- natación. Cuenta con la certificación de la Federación Internacional de Natación (FINA).
Por todo ello la Videna se erige como un emblema deportivo para el Perú, con instalaciones que cumplen con largueza los estándares internacionales. Es en este recinto multideportivo donde se hace carne el concepto de legado, con instalaciones que han sido sede de una gran cantidad de eventos internacionales, de los más variados deportes, y con muchos más en carpeta. La Videna, con las adecuaciones que sean del caso realizar para 2027, es por sí sola un contundente argumento para explicar por qué América votó mayoritariamente por entregar a la “Ciudad de los Reyes”, por segunda vez en ocho años, la mayor fiesta deportiva del continente.
La Videna es un verdadero laboratorio deportivo, donde el alto rendimiento es parte fundante de los nuevos desafíos de cientos de atletas peruanos, todos, sin excepción, reconocen y valoran la gran inversión, pero también, sienten la obligación de responder a ese nivel de expectativas que tiene el pueblo limeño. Ahora bien, no sorprenda que, en el mediano y largo plazo, el Team Perú se convierta en una potencia del continente. Hoy, su realidad contrasta con la del pasado, claro, sin olvidar sus raíces donde está la esencia de estos deportistas, jóvenes que sueñan con ser protagonistas y alcanzar un sitial de privilegio a nivel internacional.