Chile se está elevando como sede de importantes eventos internacionales. En 2023 ya albergó los Juegos Panamericanos por primera vez en su historia y ya tiene agendado otros campeonatos, como el Mundial de Ciclismo de Pista de 2025 o el anuncio de su candidatura para ser sede de los Juegos Olímpicos de 2036. Pero no solo eso, sino que también en baloncesto, donde FIBA Americas ya puso sus ojos para que el país andino sea escenario de algunos de sus torneos.
En 2024 Chile será sede del Sudamericano femenino, primera gran noticia. Entre el 29 de agosto y el 5 de septiembre se disputará el evento en el Centro de Deportes Colectivos en el Parque Estadio Nacional, el cual fue el epicentro de los Panamericanos de Santiago 2023. La buena imagen que dejó el país en cuanto a organización de grandes eventos seguramente jugó su parte para la segunda gran noticia que recibió el país sudamericano: en 2025 recibirán la Americup femenina, el torneo de selecciones más importante del continente.
Será la segunda vez que Chile sea sede de la Americup, tras lo hecho en 2007 en el sur del país, en el Coliseo Antonio Azurmendy de Valdivia, comúnmente conocido como la Catedral del Básquetbol Chileno. En 2025 será Santiago, la capital, la ciudad anfitriona. Los países que disputarán el campeonato se definirán en el torneo Sudamericano (se entregan tres cupos más el que tendrá Chile como anfitrión) y en el Centroamericano de noviembre, que entregará otras cuatro plazas. A ellos se sumarán Estados Unidos y Canadá para completar el cuadro de 10 equipos.
«Estamos de llevar estos dos torneos muy importantes para todo el continente y que creo que van a salir muy bien», comentó Fernando Borro, presidente de FIBA Americas al Canal CDO de Chile. «Se unen una serie de factores para tomar esta decisión: los 100 años de la Federación de Básquetbol de Chile, el legado de los Juegos Panamericanos y el apoyo de un gobierno como el de Chile, que apoya a su deporte nacional y estos eventos significativos. Nos salió muy fácil designar la sede para el Sudamericano y la Americup«, añadió el directivo argentino.
«Es un día histórico para el básquetbol chileno», valoró Irán Arcos, Presidente de la Federación de Básquetbol de Chile, el anuncio. En tanto, el ministro del Deporte, Jaime Pizarro, manifestó: «Nos alegra enormemente, para nuestro país es importante continuar desarrollando y potenciando distintas actividades, especialmente después de las demostraciones en los Panamericanos con el básquetbol y el basket 3×3 con mucho público y buenos resultados deportivos».
Lo cierto es que Chile ha venido creciendo y su Federación de Básquetbol también ha tenido que trabajar arduamente para generar una estructura de baloncesto femenino en el país. Desde lo más doméstico a lo más internacional. Comenzando porque este año se está jugando por primera vez la Liga Nacional Femenina con dos categorías tras el aumento de interés de los clubes representativos de distintas ciudades por participar. La primera división, de hecho, cuenta con dos zonas: centro y sur. En esta última participa Español de Punta Arenas, proveniente de una de las ciudades más australes del mundo y que, sin embargo, ha sido cuna de grandes basquetbolistas en la historia chilena.
Y en cuanto a la selección, los avances también se han visto. Hay un fuerte interés en el basket 3×3, de ahí que la selección chilena compitiera en los últimos preolímpicos a París 2024, aunque sin conseguir el boleto a los Juegos Olímpicos. Es el renacer de un básquetbol femenino que por los años 50 era fuerte en el país. De hecho, en el Mundial de 1953 en el que fueron anfitriones consiguieron la medalla de plata. En los Panamericanos de Santiago 2023 se subieron al podio obteniendo el bronce, de ahí que el objetivo en la Americup sea estar entre las cuatro mejores selecciones.
El trabajo ya comenzó en la Federación y también para las jugadoras, que han realizado una serie de concentraciones junto a Cristian Santander, el refichado técnico argentino que volvió al mando tras pasar por la selección masculina de Chile y algunos clubes. La Roja, hoy bajo el apodo de las Guerreras, se ilusiona con seguir creciendo y volver a sus mejores tiempos de gloria.