La ciudad de Ayacucho está viviendo un momento histórico con la celebración de los Juegos Bolivarianos 2024, un evento que, según Rosa Alegría, Secretaria Administrativa del Proyecto Especial Legado, ha transformado la región de Huamanga y dejado un impacto imborrable en sus habitantes. Esta entrevista exclusiva con SportsIn revela los desafíos y logros de este acontecimiento.
“El impacto en Ayacucho y en Huamanga ha sido bárbaro. Estamos muy contentos porque hemos visto muchos visitantes llegar, lo que ha dinamizado la economía en la parte turística, alojamiento y alimentación”, asegura Alegría. Además, destaca que se certificó a artesanos locales para que promuevan sus productos con el logo oficial de Ayacucho 2024. También resaltó la importancia de la ruta de la antorcha, conocida como «el camino que nos une”, que recorrió las 11 provincias de Huamanga: “Ha sido muy hermoso. Esto ha sido un evento sin precedentes para la región”, subraya.
«UNA INAUGURACIÓN HERMOSA»
Uno de los momentos más emocionantes fue la inauguración, que aunque tuvo que ser pospuesta debido a intensas lluvias, logró ser un éxito rotundo. “Fue una decisión muy difícil porque estábamos preparados para la lluvia, pero no para el diluvio que hubo con tormentas y todo”, explica. Incluso se habían preparado ponchos para los asistentes, pero las condiciones extremas representaban un riesgo. “Llovió 12 horas seguidas con una intensidad muy fuerte, así que por eso tuvimos que posponer el evento”, afirma Alegría. La organización enfrentó el reto de realizar en un solo día todos los trámites necesarios para garantizar el evento: permisos municipales, aprobaciones de juegos pirotécnicos y garantías de seguridad. “Valió la pena porque la inauguración salió hermosa”, afirma con orgullo.
En cuanto a los desafíos logísticos, Alegría reconoce que Ayacucho no estaba completamente preparada para recibir una competición de esta magnitud. “Es una ciudad que todavía no está preparada para recibir a todos los deportes con los que teníamos que salir en estos juegos”, comenta. Sin embargo, el equipo trabajó arduamente para adaptar instalaciones, incluyendo colegios y universidades, en tiempo récord. “Hemos implementado todo en menos de cinco meses, incluso cuando llegamos no estaba ni el expediente técnico aprobado para las obras de la Vía Bolivariana”, detalla. Las sedes adaptadas incluyeron la Universidad Nacional de San Cristóbal y dos colegios donde se habilitaron instalaciones para deportes como billar, gimnasia artística y el parque de 3×3.
ALOJAMIENTO, INSTALACIONES DEPORTIVAS, EQUIPAMIENTO…
El legado de estos juegos es también significativo. “Hemos construido dos torres de habitaciones y un comedor que quedarán como legado para la Universidad San Cristóbal de Huamanga, además de un skate park y equipamientos deportivos”, agrega Alegría. Estas mejoras también incluyen infraestructura para competiciones de frontón y bochas. “Todo ese legado, más el equipamiento que hemos adquirido, se va a quedar en el suelo”, enfatiza.
El entusiasmo de los habitantes de Ayacucho ha sido palpable. Alegría recuerda con emoción los agradecimientos de los asistentes durante la inauguración. “Mucha gente se me acercó diciendo: «Muchas gracias, nunca pensé ver un espectáculo como este en mi tierra». Es muy gratificante”, confiesa. Para Alegría, esta experiencia ha sido una reafirmación del potencial de Ayacucho. “Los huamanguinos están muy contentos, nosotros estamos muy contentos y hemos puesto a la palestra esta hermosa región”, concluye emocionada.