En un movimiento que aparentemente podría obstaculizar la esperada candidatura de Sebastian Coe a la presidencia del Comité Olímpico Internacional (COI), el organismo ha aclarado sus complejas reglas electorales antes del plazo límite de este domingo para entrar en la carrera. En una carta enviada por la comisión de ética del COI a los 111 miembros, incluido Coe, especificó razones por las que el presidente de World Athletics, de 67 años, podría no competir por ser presidente del COI.
El texto, fechado el lunes, especifica que el candidato ganador debe ser miembro del COI el día de la elección, prevista para marzo en Grecia, «y durante toda la duración de su mandato». Esto implicaría que Coe, cuyo estatus como miembro del COI depende de su cargo en World Athletics, tendría que dejar dicho cargo tres años después de ser hipotéticamente elegido -en 2027- al finalizar en esa fecha los 12 años máximos permitidos en su cargo actual.
Esta aclaración ha generado incertidumbre sobre su elegibilidad. Coe, quien ha presidido World Athletics durante nueve años y fue líder del comité organizador de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, es considerado como uno de los candidatos más calificados para dirigir el COI. Sin embargo, su mandato en World Athletics finaliza en 2027, sólo tres años después del inicio de un posible mandato como presidente del COI, lo que complicaría la candidatura del doble campeón olímpico en los 1.500 metros y exlegislador en Reino Unido.
SAMARANCH JR, TAMBIÉN EN APUROS
Además de Coe, otro candidato esperado, el español Juan Antonio Samaranch Jr, actual vicepresidente del COI, también podría enfrentar problemas debido a las restricciones de edad. Samaranch cumple 65 años en noviembre, y las reglas de la Carta Olímpica establecen un límite de edad de 70 años para los miembros, con una posible extensión de solo cuatro años. De ser aprobado, su mandato también terminaría antes de completar un ciclo completo como presidente del COI, que se extendería de 2025 a 2033.
El presidente de la comisión de ética del COI, Ban Ki-moon, afirmó en la carta: «La carta no hace excepciones para el presidente, quien es miembro del COI bajo las mismas condiciones que los demás miembros».