Pierre de Coubertin, el hombre que fundó los Juegos Olímpicos como los conocemos en la actualidad mandó una carta en 1937 a Adolf Hitler y esta semana se ha conocido su contenido tras publicarse en el libro ‘Pierre de Coubertin: el hombre que no inventó los Juegos Olímpicos’, recogida por el historiador alemán Hans Joachim Teichler de los archivos del Tercer Reich. Aymeric Mantoux, autor de este nuevo libro sostiene que contrariamente a los que dice el COI y la familia de Coubertin, la relación entre el fundador de los Juegos Olímpicos y Hitler era buena.
En la carta Coubertin refleja el agradecimiento al régimen alemán por su contribución a los 50 años de los Juegos Olímpicos ya que el fundador de los Juegos Olímpicos modernos quería que sí o sí se celebraran los de Berlín en 1936.
Aunque fundó y ayudó a la propagación de los Juegos Olímpicos como los conocemos, Pierre de Coubertín sigue siendo conocido por sus opiniones conservadoras y colonialistas. Tanto es así que Mantoux, autor del libro recién publicado, sostiene que “no creo que abrazara la ideología nazi pero entre su visión y la del Tercer Reich encontramos puntos comunes en torno al deseo de revitalizar una nación a través del deporte”.