Los Ángeles ha dado un paso decisivo hacia unos Juegos Paralímpicos abiertos e inclusivos. El pasado viernes, antes del 35º aniversario de la Ley de Estadounidenses con Discapacidad -ADA-, la alcaldesa Karen Bass se unió a Colleen Wrenn, directora de Juegos Paralímpicos del Comité Paralímpico Internacional –IPC-, al consejero municipal Imelda Padilla, al director ejecutivo de LA28 Reynold Hoover, a atletas paralímpicos y a líderes comunitarios para reafirmar el compromiso de la ciudad con unos “Juegos para todos” de cara a 2028.
La ciudad no solo firmó el Compromiso de Accesibilidad de la Ciudad Anfitriona de los Juegos, sino que también anunció el desarrollo de un Plan de Accesibilidad para los Juegos y la creación de la figura del primer responsable de accesibilidad dentro de la Oficina de Grandes Eventos de la Alcaldía. Además, el Departamento de Discapacidad de Los Ángeles y el Braille Institute colaboraron para instalar traducciones en braille en las banderas olímpica y paralímpica del Ayuntamiento.
Un plan integral de accesibilidad para LA28
“Si bien hemos avanzado mucho desde la firma de la Ley de Estadounidenses con Discapacidad hace 35 años, todavía queda trabajo por hacer para que los angelinos de todas las capacidades puedan prosperar en Los Ángeles”, afirmó la alcaldesa Karen Bass. “Estamos trabajando con todos los departamentos municipales y socios privados para desarrollar e implementar un Plan de Accesibilidad que nos permita acoger los Juegos más accesibles posibles”.
Padilla, quien de niña enfrentó problemas de movilidad, subrayó la importancia de esta iniciativa: “La accesibilidad no solo es cuestión de funcionalidad, también de dignidad e inclusión. Por eso propuse la moción para crear un plan integral que garantice que la accesibilidad esté presente en cada etapa de la organización de LA28”.
Impacto más allá del deporte
Colleen Wrenn, del IPC, destacó el potencial transformador de estos Juegos: “El compromiso de Los Ángeles y LA28 para organizar unos Juegos accesibles supone una oportunidad extraordinaria para avanzar en el legado de la ADA. Los Juegos Paralímpicos muestran lo que ocurre cuando se eliminan barreras y nos inspiran a imaginar un mundo en el que las personas con discapacidad puedan vivir, trabajar y participar plenamente en la sociedad”.
Reynold Hoover, director ejecutivo de LA28, añadió: “El año pasado nos convertimos en el primer comité organizador en la historia en proponer y añadir un nuevo deporte al programa paralímpico, lo que hará que LA28 sean los Juegos Paralímpicos más grandes de la historia. Agradecemos el liderazgo de la alcaldesa Bass y su compromiso con una experiencia accesible para todos”.
Un legado para toda la ciudad
Scott Blanks, vicepresidente de Accesibilidad y Empleo en el Braille Institute, señaló: “Mi experiencia como paralímpico me enseñó que las mayores barreras no siempre son físicas, sino de actitud. Los Paralímpicos son un recordatorio del potencial humano, y LA28 puede convertirse en un catalizador no solo para los atletas, sino para cada persona con discapacidad en Los Ángeles”.
Por su parte, Stephen David Simon, director del Departamento de Discapacidad de Los Ángeles, recalcó: “Los Juegos no son solo un evento global, sino una oportunidad para ampliar la equidad y reforzar el liderazgo de las personas con discapacidad. Este compromiso se basa en décadas de trabajo y nos permitirá avanzar hacia una ciudad inclusiva”.
Un símbolo de inclusión en cada rincón
El acto tuvo lugar en el LA84/John C. Argue Swim Stadium, una instalación construida para los Juegos Olímpicos de 1932 y renovada tras la firma de la ADA para incluir ascensores, baños accesibles y sistemas de apoyo en las piscinas. Actualmente, el recinto ofrece clases gratuitas y adaptadas como parte del programa PlayLA, que recientemente superó el millón de inscripciones.
La Ley de Estadounidenses con Discapacidad, firmada el 26 de julio de 1990, es una legislación fundamental de derechos civiles que prohíbe la discriminación por motivos de discapacidad en todas las áreas de la vida pública, incluido el empleo, la educación, el transporte y el acceso a espacios abiertos al público.




