¿Qué está pasando hoy en día con la Inteligencia Artificial? Si pudiéramos definir semánticamente la IA, nos encontramos con un caudal de citas conceptuales -todas en la misma dirección- destacando sus beneficios, pero también riesgos que conlleva. La IA ya es una tecnología económicamente transformadora, puede ayudar a curar enfermedades, hacer descubrimientos científicos y superar desafíos que alguna vez pensamos que eran insuperables y, el deporte es parte de esta nueva revolución industrial, conocida como la 5.0. Pero, ¿la IA es compatible con los valores que desprende el deporte? La IA fue una de las protagonistas en las distintas ponencias del reciente SportAccord y es que, sin darnos cuenta, ya forma parte de nuestro día a día.
Según Stuart Russel y Peter Novig, dos eminencias en este campo, “la IA es una especialización de la informática que crea y desarrolla sistemas de programas capaces de realizar tareas que normalmente requieren inteligencia humana. Estas tareas incluyen el aprendizaje, el razonamiento, la resolución de problemas, la percepción, el procesamiento del lenguaje natural y la toma de decisiones. La IA se basa en la simulación de procesos cognitivos humanos mediante algoritmos y modelos matemáticos».
Nadie puede desconocer los atributos que tiene la IA, pero ¿cómo la aterrizamos al deporte sin violentar los principios que promueve el olimpismo o un ciudadano común que se inspira por la pasión que envuelve la práctica de su deporte favorito? La Inteligencia Artificial ha emergido como una poderosa herramienta en diversas disciplinas y campos, y el deporte no es una excepción.
La IA, sólo como ejemplo, puede ser utilizada para mejorar el rendimiento de un atleta de élite, meter datos de sus entrenamientos y competiciones y hacer una proyección de rendimiento con una precisión nunca vista. Al tener esa información el equipo multidisciplinario puede tomar decisiones que redundaran en un mejor resultado deportivo. Para implementar este soporte tecnológico del atleta en cuestión se requiere de una inversión económica alta, por lo tanto, el acceso a la IA está condicionada también a quienes pueden pagar. En este punto, los países desarrollados o vanguardistas siguen aumentando su ventaja sobre aquellos países en vías de desarrollo u otros que están cada vez más distantes de tener la posibilidad de competir y sólo participan con sus limitaciones propias en los grandes eventos.
En columnas anteriores de SportsIn publicamos la crisis que vive el boxeo internacional por amaño de peleas en los JJOO de Río y Tokio, todos se preguntan por qué no se implementa un sistema con IA para hacer que el arbitraje sea más objetivo y validar correctamente las puntuaciones y tener un fallo apegado al reglamento y erradicar de una vez las suspicacias de un veredicto. Pareciera que es un tema de voluntad, salvo que los más conservadores defiendan la tesis de que se perdería la esencia el boxeo si se introduce la tecnología para colaborar en el juzgamiento de una pelea. En este caso en particular, la Inteligencia Artificial sería un aporte sin precedentes. No se sorprendan si en pocos años vemos arbitrando robots, símil a un ser humano, con la única diferencia que no transmitirá emociones, pero el resto estará incorporado con los datos necesarios antes de lo que imaginamos.
JUEGOS OLÍMPICOS eSPORTS
Volvamos al mundo de los seres humanos por un momento y olvidémonos de las máquinas. Como es de conocimiento público, el Comité Olímpico Internacional abrió las puertas literalmente a la IA con los eSports. Incluso fue más allá y puso fechas tentativas para los Juegos Olímpicos eSports, apuntando al 2025 o 2026, a más tardar. Entiende el COI que este es un mercado invaluable, de alcances sin precedentes, pudiendo competirles a los tradicionales juegos olímpicos de verano y sumarlo a su portafolio de grandes eventos.
«Nos mantendremos fieles a nuestros valores olímpicos»
Cito a Tomás Bach, presidente del COI: “La Inteligencia Artificial y los deportes electrónicos ofrecen enormes oportunidades. Sea cual sea la forma que adopten los Juegos Olímpicos eSports, nuestros parámetros y condiciones están establecidos. Nos mantendremos fieles a nuestros valores olímpicos de paz, respeto, no discriminación y solidaridad”. La apuesta es clara.
Emporté… par les Jeux, le sport, la fête ✨
Dans 100 jours, #Paris2024 pic.twitter.com/95Hj9txDyQ— Paris 2024 (@Paris2024) April 17, 2024
Durante el desarrollo de esta columna editorial he intentado separar las emociones de lo racional y reconozco que durante largos minutos la máquina me consumió. Sentí que parte de mí se mimetizaba con los atributos que tienen estas mentes digitales, cada vez más poderosas que nadie, asumiendo, además, que no tienen conciencia afectiva, sí cognitiva.
Provoca un grado de temor no saber los límites a los cuales estamos sometidos, por lo mismo, la invitación es hacer un uso responsable de la IA en el deporte. Esto significa la implementación de políticas claras de privacidad de datos y seguridad, así como la promoción de la igualdad de oportunidades para todos, independiente a su condición social, religiosa y política. Además, es fundamental mantener un equilibrio entre el uso de la Inteligencia Artificial y la toma de decisiones acorde con la intuición y la experiencia humana para conservar la esencia del deporte.