Reza Alipour Shenazandifard, cariñosamente conocido como el ‘Guepardo Persa‘, no es solo un nombre sinónimo de velocidad en el mundo de la escalada deportiva, sino también de compasión y responsabilidad social. Nacido en 1994 en Qazvin, Irán, Alipour se ha consolidado como uno de los escaladores de velocidad más rápidos del mundo, estableciendo récords que han inspirado a innumerables atletas. Sin embargo, su impacto va mucho más allá de los muros de escalada, llegando a las vidas de algunos de los miembros más vulnerables de la sociedad.
El viaje de Alipour en este deporte ha sido nada menos que extraordinario. Ha dominado el mundo de la escalada de velocidad, rompiendo récords y ganando elogios por su agilidad y rapidez. En 2017, estableció un entonces récord mundial de 5,48 segundos en escalada de velocidad, un testimonio de su dedicación y habilidad. Su destreza se mostró nuevamente en los Juegos Olímpicos de París 2024, donde estuvo cerca de obtener una medalla, quedando en cuarto lugar con un impresionante tiempo de 4,88 segundos. Aunque no alcanzó el podio, su desempeño consolidó su estatus como uno de los mejores atletas en su disciplina.
APOYO A LOS NIÑOS TRABAJADORES
Sin embargo, son las acciones de Alipour fuera del muro las que realmente lo distinguen como un modelo a seguir. Recientemente, en un gesto conmovedor, Alipour anunció a través de Instagram que subastaría el teléfono Samsung especial que le fue regalado como participante olímpico. Los fondos recaudados de esta subasta están destinados a apoyar a los niños trabajadores en los hornos de ladrillos de su ciudad natal, Qazvin, una causa muy cercana a su corazón. Esta iniciativa no es un evento aislado; Alipour, junto con sus amigos, ha recaudado fondos de manera constante para apoyar a estos niños, haciendo una diferencia tangible en sus vidas año tras año.
Esta combinación de excelencia atlética y un profundo compromiso social subraya el carácter de un hombre que comprende el impacto más amplio de su éxito. La decisión de Alipour de usar su regalo olímpico para ayudar a los niños trabajadores resalta un problema significativo en Irán y en muchos otros países: niños atrapados en ciclos de pobreza y obligados a trabajar. Al llamar la atención sobre su difícil situación, Alipour utiliza su fama no solo para recaudar fondos, sino también para concienciar sobre un problema que a menudo se pasa por alto.
#SpeedClimbing World Record Holder Reza ALIPOUR 🇮🇷 is enjoying the fresh air and beautiful weather while keeping up with his training. Who else has moved their training outdoors? #IFSCathlete #IFSCtraining #IFSCglobal #StaySafe #WorkoutWednesday pic.twitter.com/17zkvmx18v
— International Federation of Sport Climbing (@ifsclimbing) June 3, 2020
En un mundo donde el foco suele permanecer en los logros físicos de un atleta, Reza Alipour destaca como una figura que utiliza su plataforma para un bien mayor. Su legado no solo será recordado por los récords que estableció en el muro de escalada, sino también por las vidas que ha tocado a través de sus esfuerzos caritativos. Alipour encarna el verdadero espíritu de un olímpico: excelencia en el deporte acompañada de un compromiso con la humanidad. Mientras el ‘Guepardo Persa’ continúa su ascenso, tanto en el muro como en la vida, sigue siendo una figura inspiradora, mostrando que la velocidad y la fuerza son más poderosas cuando se utilizan al servicio de los demás.
