Quedaban 59 kilómetros para finalizar la siempre dura Paris Roubaix en los adoquines franceses y en la cabeza de la estrella del momento surgió una nueva estrategia. Como si no hubiera cansancio y horas de pedaleo encima, Mathieu Van der Poel comenzaba a sacar ventaja ante sus perseguidores en una arrancada improvisada. Estaba solo, liderando una carrera difícil y consolidándose como el gran campeón que hace tiempo viene demostrando que es. Al parecer, su nueva vida en España, en Alicante, tiene mucho que ver el ciclista que arrasó en una histórica victoria en Alpecin.
“Tengo menos compromisos aquí. Estoy más a gusto, aunque la principal razón es que puedo entrenar con un clima mejor. Incluso disfruto con los entrenamientos largos. Cinco horas bajo el sol, con otros ciclistas, parando a tomar el café…”, se sinceraba recientemente en una entrevista al semanario belga Knack, donde no escondía su conformidad con su nuevo hogar en la Marina Alta alicantina.
Fruto de esos largos entrenamientos, asegura que “ahora puedo pedalear a una potencia casi tan alta como la del comienzo de una carrera en el kilómetro 240 o 260”, algo que se comprobó en la Paris Roubaix de hace unos días, donde arrasó con todo.
SU PAREJA, UNA BLOGUERA DE MODA BELGA
Al margen de esos entrenamientos está la calma y equilibrio su pareja Roxanne Bertels, una blogera belga del mundo de la moda. Un día a día modesto, tranquilo y con hobbies sencillos como jugar al pádel o ver una serie de Netflix. Aunque ahora, junto al Mediterráneo y su sol, ha descubierto el golf, otra actividad que le aporta relajación al tiempo que le mantiene con la mente ocupada puesto que es un deporte que está lejos de dominar.
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Seguramente, todo este ambiente le ayude a construir la capa ‘anti preocupaciones’ de la que es tan famoso. “Hemos hablado de esto en el equipo, pero prefiero hablar con la gente cercana cuando tengo que afrontar reveses”, explica en Knack.
A sus 29 años, Van der Poel es el ciclista de moda por su dominio y la facilidad que demuestra en cada prueba. Ya son 53 los títulos para el neerlandés. Desde sus inicios en el ciclocross, una modalidad que podría asemejarse con los adoquines de Paris Roubaix en cuanto a los obstáculos, pero que involucra en algunos tramos bajarse de la bicicleta y correr junto a ella ante terrenos complicados, que el ciclista ha venido demostrando estar preparado para cualquier suelo… veremos si también para el del green de los campos de golf de España.
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