Cómo Kishane Thompson se ha convertido (por sorpresa) en la nueva amenaza para Estados Unidos
Patricio Díaz
julio 2, 2024

Kishane Thompson acaba de situarse primero en la corta carrera de los 100 metros lisos de los Juegos Olímpicos por su reciente crono en su país, Jamaica. París 2024 no sólo verá un trepidante duelo entre varios aspirantes, también si el país caribeño confirma su hegemonía y cómo Estados Unidos, como últimamente, ve cómo es superado por este pequeño país de sólo 2,8 millones de habitantes.

Hace 112 años se registró por vez primera el récord mundial de los 100 metros lisos, homologado por la IAAF. En esa oportunidad, el estadounidense Donald Lippincott alcanzó un crono de 10,6 segundos, en los JJOO de Estocolmo de 1912. Pasaron nueve años hasta que Charley Paddock, también de Estados Unidos, lo rebajó a 10,4 segundos. Hasta 1930 no hubo nuevo récord, por el canadiense Percy Williams, y es que estos extensos lapsos tenía que ver con la toma manual de tiempos (y solo tomados con décimas de segundo). Solo seis hombres más pudieron igualar el récord de 10,3 segundos antes de 1936, cuando Jesse Owens bajó la marca a 10,2 segundos. La aparición del cronómetro automático se convirtió en un requerimiento para marcar los récords del mundo desde 1977. En este momento fue también cuando los tiempos pasaron a tomarse en centésimas. Este es el contexto del avance incontrarrestable de la velocidad humana, bajando el cronómetro a niveles impensados hace años.

El segundo gran cambio, además del cronómetro, ha sido la pérdida de la hegemonía estadounidense y el ascenso de la jamaicana. Primacía que confirma el expectante presente de Kishane Thompson, aspirante a hombre más rápido del planeta. Actualmente, su marca (9,77) es la cuarta a nivel mundial, siendo superada por sus compatriotas Usaint Bolt (9,58), Yohan Blake (9,66) y Asafa Powell (9,72). El antecedente numérico, logrado en los “Trials” de Kingston esta semana pasada, hace que Thompson se convierta en uno de los nombres que el mundo del deporte seguirá con especial atención en París 2024.

LAS MARCAS DEL ‘RELÁMPAGO DE JAMAICA’

El nuevo ‘relámpago de Jamaica’, como ya lo apoda la prensa, disputará los Juegos Olímpicos con 23 años. El hombre de pelo ensortijado es un reciente invitado a la elite de la velocidad, desde su debut en la Liga Diamante de Mónaco hace un año, corriendo 10,04 segundos para terminar quinto. En septiembre de 2023, bajó su marca personal de 100 metros a 9,85 para terminar segundo en el evento de la Liga Diamante en Xiamen, China.

Así hasta llegar al pasado 27 de junio, cuando ha logrado su mejor crono personal y ganar el título nacional de Jamaica, lo que lo coloca en la ‘pole position’ para quedarse con la competición reina de la velocidad planetaria en los JJOO. Con este tiempo, Thompson se convirtió en el noveno hombre más rápido de la historia, situándose detrás de cinco estadounidenses y tres jamaicanos.

La electrizante irrupción de Thompson viene a confirmar su tajante respuesta, ante las dudas sobre su capacidad para lidiar con las expectativas que creaban sus ascendentes resultados: “Mentalmente ya estoy preparado para soportar la presión”, señaló sin dudas en enero pasado. Uno de los factores que auguran un cielo despejado en el futuro del atleta es el palmarés de su entrenador, Stephen Francis, un reputado preparador que impulsó la velocidad en Jamaica a comienzos de siglo con Asafa Powell, el primer plusmarquista mundial de los 100 metros planos de la isla.

SU ESPINILLA Y PROPENSIÓN A ENGORDAR

Pero también hay aspectos que asoman como amenaza para el cumplimiento de las metas propuestas. Uno es la propensión a las lesiones (la última fue un desgarro en el cuádriceps en enero), que ha hecho de la dosificación de competiciones, receta de Francis para eludir el fantasma de afecciones musculares en tan expectante momento para su pupilo. Otros son los continuos problemas en la espinilla y su propensión a engordar, tratados en los últimos meses con una máquina antigravitatoria. “Los conocimientos que tenemos ahora son muy superiores a los que teníamos hace 15 años y no se tendrá que enfrentar a los desafíos que tuvo que afrontar Powell», sentenció un optimista Francis ante los mecanismos de mitigación que hoy tiene a su disposición.

Para la cita en la capital francesa, al margen de sus compatriotas, es el equipo estadounidense con su crédito Noah Lyles, el obstáculo más serio que tendrá Thompson para coronar su sueño dorado. Lyles ganó el clasificatorio olímpico de su país, lo que sumado a su triunfo venciendo a los mejores sprinters del orbe en Budapest (Thompson se restó por su plan de dosificación), lo incluyen con autoridad en la lucha por el podio parisino.

El tiempo para la especulación está quedando atrás y será la pista del Stade de France la que, del 1 al 11 de agosto, recibirá a los mejores atletas a nivel planetario. Ocasión en que, una vez más, los ojos de la afición contemplen en menos de 10 segundos la épica lucha por conquistar la corona del hombre más veloz del planeta. Kishane Thompson llegará como favorito, con sus piernas listas para soportar el peso de la carrera y su cuello presto para recibir la medalla, que en su mente no puede ser otra que la dorada. El príncipe de la dinastía jamaicana está hace rato en el punto de partida esperando el disparo, para correr por la corona y para citarse con la historia.

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