La WTA ha anunciado esta semana una medida innovadora que permitirá a las tenistas que decidan suspender sus carreras para congelar óvulos o embriones beneficiarse de un ranking protegido al regresar a la competición. Esta iniciativa busca apoyar a las atletas en su decisión de priorizar tratamientos de fertilidad sin comprometer sus carreras deportivas.
Las jugadoras clasificadas entre el puesto 1 y el 750 en individuales o dobles podrán acogerse a esta medida si permanecen al menos 10 semanas consecutivas fuera de competición debido a un procedimiento de protección de la fertilidad, según informó la WTA en un comunicado.
Declaraciones de apoyo a la nueva medida
Sloane Stephens, ganadora del Abierto de Estados Unidos en 2017, expresó su satisfacción con esta iniciativa: “Estoy increíblemente orgullosa de que nuestro deporte reconozca la importancia de los tratamientos de fertilidad para las atletas femeninas. Esta es una verdadera innovación que permitirá a esta generación y a las futuras seguir practicando el deporte que aman sin tener que renunciar a nada”.
Portia Archer, directora ejecutiva de la WTA, también destacó el impacto positivo de esta medida: “Las tenistas pueden enfrentarse al dilema de centrarse en sus carreras y formar una familia. Nos complace que esta nueva medida ayude a nuestras atletas a alcanzar su máximo potencial y convertirse en madres cuando lo deseen”.
Cómo funciona el ranking protegido
El sistema de ranking protegido permite a las jugadoras conservar su clasificación previa durante un periodo de transición tras una larga ausencia. En este caso, la clasificación protegida se calculará con base en el promedio de las doce semanas previas al descanso de la jugadora.
Este ranking podrá aplicarse al regreso de la atleta para un máximo de tres torneos, ya sean de las categorías 125, 250 o 500. Cabe destacar que este sistema ya estaba disponible para jugadoras embarazadas, y ahora se amplía para incluir a quienes opten por tratamientos de fertilidad.
Con esta medida, la WTA refuerza su compromiso con el bienestar de las tenistas, permitiéndoles equilibrar sus carreras deportivas con decisiones personales relacionadas con la maternidad y la fertilidad. Sin duda, este avance marca un hito en el deporte femenino.